sábado, 15 de noviembre de 2008

Los restos de mi inocencia



Solo se necesitan
cuatro paredes
una cama
tú y yo
para regalarte
los restos de mi inocencia
entre el dolor y el cariño
el miedo y la emoción
apretaré tu pecho contra el mío
mientras me cubres con tu peso
tu serás el primero para mi
yo seré la última para ti
cuando todo haya acabado
voy a encender un cigarro
para que me abraces
como si no te fueras a ir
y me digas cosas lindas
como solo tu sabes hacerlo
y cuando te vayas
te llevarás en la maleta
los restos de mi inocencia
que en un momento
te regalé a ti.

2 comentarios:

Trenzas dijo...

Bonitas imágenes en palabras.
Me gusta como expresas el momento, con esa dulzura.
El amor siempre debería ser así.
Un abrazo.

fugaz dijo...

Eso es amor